viernes, 23 de julio de 2010

Ausencias tres.

Los miedos de ti que resuenan en mí. ¿Qué hacer con todo esto?. Me vuelve a estallar entre las manos. Te necesito, lejos, cerca, pero lo hago. Te necesito.
El abismo sigue ganándome tierra bajo los pies, y la distancia que se podría medir en km ahora mismo se me desmesura entre los dedos y se me suman los infinitos de tal manera que termino cuestionándome lo que fue y no real. Qué parte de ti invento porque no estás y necesito de ese ti en el modo ausencia que te supla lo físico. Esas facetas que nunca me dijiste cómo terminaban en la historia, entonces las creo y te las atribuyo consciente de que llegará el día en que no valdrá mirarte con estos ojos de lupa sino con los reales y enfrentarme a que realmente no eres lo que inventé, endémico de tu propia esencia, claro. Entonces comenzarán los desajustes en esta visión y me secaré las lágrimas con la esquina de esta historia áspera.
Y no existen besos para cuando miras una cara conocida pero un alma desconocida, como besar un disfraz.

No vuelvo dentro de lo nuestro porque será como empezar de nuevo, con esta ansia de lo conocido con la que me acuesto hoy.. Y cada noche desde la última vez.

1 comentario:

Anónimo dijo...

No se que decirte... dificil de comprender pero por eso eres tan magnifica! :)